No puedo dormir.
En estas semanas en mi colorido y ruidoso país, he aprendido demasiado.
A como es la realidad lejana, la cercana, la pasada y la nueva.
No suelo ventilar DMs (Mensajes directos en twitter (pa' los que no tienen))
Pero sin decir nombres, esta frase se ha quedado marcada:
"Siempre dicen que los viajes ilustran. Olvidan decir que el regreso te muestra que tanto."
Y así han sido las cosas, con mi "libertad" limitada y mis arranques de no se que.
Quizá soy demasiado diferente, quizá las cosas cambiaron, estoy casi segura que fueron ambas y que no se exactamente como lidiar con eso.
Tirar cosas del pasado a la basura, cansa, no duele, pero fatiga.
Tanta ropa, tantos recuerdos, tantos zapatos y cosas que han perdido significado.
Me leo y me desconozco, me observo y me siento fuera de lugar.
No es que prefiera allá que aquí, no es que me sienta mejor con ciertas personas,
es sólo que ahora estoy demasiado bien conmigo misma y no se como llegar a las rutinas donde ya no correspondo.
Sin dramas, sin llanto, sin espectáculos circenses.
La Suheyl de México nunca será igual como se fue, que como regresó
Y así las cosas.