domingo, 11 de julio de 2010

Moriré ahogada en lagrimas que no brotan.

Tenía ya la idea clara de como postearía la forma en la que me siento; de pronto se viene la imagen de M a mi cabeza y sus locas letritas, con aliento a café, que no tiene mucho que me dijeron:
"¿No hay más drama? Entonces, ¿a qué te dedicas ahora? "

La verdad es que no se por qué tanto pinche drama, siempre dramas conmigo, SIEM-PRE!
Sí, me llego a fastidiar demasiado de mi caprichoso sentir.

Debería estar en la Cibeles, festejando esta final con la gente que me ha abierto los brazos de su tierra, debería estar embriagada, sin preocupaciones, sin lágrimas atoradas en los ojos, en el corazón, en los pies... debería poder salir a gritar a la calle "¡¡SOY LIBRE!!" ¡¡VOY CON LA ROJA!! ¡¡GRACIAS, ESPAÑA!!, ¡¡A POR ELLOS, OE!!... , pero aquí estoy, deseando que las cosas fueran diferentes.
- Hay que hacerse responsable de sus actos, jovencita.
Y yo me retiré con la sonrisa más muerta en mi vida.
Jamás había sentido el mundo aplastando descaradamente mis sueños, con mis zapatos
.

Desde Venecia venía preparando mi nuevo rostro, se derritió ante la realidad.
Una careta que sonreía.
Un corazón que ama.
una razón avergonzada
Un destino sin salida.
Y ahora no se quien soy.

Tengo tantos pendientes, que me están superando.
No quiero darme por vencida, pero necesito fuerzas,
y no se que parte de mi cuerpo las fabrican.



¡Dioses! ¡ya se me acabaron las lágrimas!
Te pienso, Sobre el tiburón rojo...

1 comentario:

Mariano Rentería dijo...

INVICTUS
Out of the night that covers me,
Black as the Pit from pole to pole,
I thank whatever gods may be
For my unconquerable soul.

In the fell clutch of circumstance
I have not winced nor cried aloud.
Under the bludgeonings of chance
My head is bloody, but unbowed.

Beyond this place of wrath and tears
Looms but the horror of the shade,
And yet the menace of the years
Finds, and shall find me, unafraid.
It matters not how strait the gate,
How charged with punishments the scroll,
I am the master of my fate;
I am the captain of my soul.



INVICTUS
Más allá de la noche que me cubre
negra como el abismo insondable,
doy gracias a los dioses que pudieran existir
por mi alma invicta.

En las azarosas garras de las circunstancias
nunca me he lamentado ni he pestañeado.
Sometido a los golpes del destino
mi cabeza está ensangrentada, pero erguida.
Más allá de este lugar de cólera y lágrimas
donde yace el Horror de la Sombra,
la amenaza de los años
me encuentra, y me encontrará, sin miedo.

No importa cuán estrecho sea el portal,
cuán cargada de castigos la sentencia,
soy el amo de mi destino:
soy el capitán de mi alma.

ELLOS ME LEEN